24 junio 2010

Fallaron otra vez y van ...

Dijo CFK: "Contra algunos pronósticos agoreros que querían que nos fuera mal, se cerró el canje de la deuda con una adhesión del 66%, que sumado al canje del anterior gobierno, de Néstor Kirchner, representa el 92,4% de la deuda defaulteada en 2001".

Cristina Kirchner también criticó a la oposición por negarse al pago de deuda mediante el uso de reservas del Banco Central de la República Argentina: " Todos los pronósticos de que las reservas se iban a caer y de que era un peligro no se cumplieron y acá estamos".
Así, la Presidente pidió hoy a la oposición en nombre de los argentinos, la no obstrucción. "Están para controlar, para vigilar, para criticar y eso está muy bien, pero lo que es inadecuado y que la Constitución no dice es que desde la oposición se esté permanentemente obstruyendo y poniendo palos en la rueda", declaró. "Oficialistas y opositores, hagamos un gran esfuerzo porque hay 40 millones de argentinos que necesitamos seguir creciendo", enfatizó la mandataria. (Ampliar Fuente)
Es indudable que cambio la logica economica que domino buena parte de la historia argentina reciente.

La deuda y los que la contrajeron por Raul Latorre.
Este “sistema” de saqueo funcionó casi sin fisuras durante dos décadas en Argentina, entre 1980 y el 2001, pero desembocó en el default de diciembre de este último año. Tan inevitable como previsible. Ayer, el ministro Boudou tuvo una frase referida a esa época que viene a cuento de lo que aquí se relata: “El blindaje, el megacanje, los créditos stand by involucraban compromisos incumplibles, acuerdos de mala fe, porque se sabía que no iban a pagarse”. El blindaje es una operación de noviembre/diciembre de 2000: fue una refinanciación de deuda por 38 mil millones con aportes del FMI, el BID, el Banco Mundial, bancos privados y el gobierno de España. Apenas seis meses después (mayo/junio de 2001) fue necesario recurrir al Megacanje para volver a bicicletear pagos. Vencimientos por 12.799 millones de dólares de corto plazo que se canjearon por compromisos a vencer entre 2006 y 2031 por 55.405 millones de dólares (más de cuatro veces la cifra original), aparte de las comisiones que cobraron David Mulford y otros amigos del entonces ministro Domingo Cavallo.
Políticos que acompañaron o alentaron aquellos gobiernos de la Argentina hoy condenan el pago de una deuda que califican de “ilegítima”. Una calificación con la que se pretende deslegitimar al actual gobierno, pero sin deslegitimar a los que aplicaron aquellas refinanciaciones nefastas. (Ampliar Fuente)